Muchas veces me gustaría explicar a las personas que me rodean cómo me he sentido a lo largo de estos diez años que he ido perdiendo audición y lo importante que ha sido tenerlos a mi lado, y la verdad es que es dificilísimo porque muchas veces para que te comprendan es necesario que se pongan en tu situación, algo imposible en este caso. Pero se me ha ocurrido una forma de contarlo con una historieta.
Año 2000: Imagínate que un día decides salir a pasear por el campo y apareces en medio de un prado verde lleno de margaritas, con un acantilado, con el mar al fondo, un cielo de colores propio de un atardecer y un faro que comienza con sus primeros destellos de la noche. Descubres que ese es el lugar más bonito relajante y que has visto nunca, y ese será tu rincón.
Año 2002: Vuelves porque recuerdas que es el rincón más bonito que has descubierto, allá te encuentras con el mismo prado verde lleno de margaritas, con un acantilado, el mar de fondo, un cielo de colores propio de un atardecer pero esta vez el faro no funciona… no importa es un detalle que no le resta encanto a tu rincón, y sigue siendo lugar más bonito relajante y que has visto nunca
Año 2004: Vuelves al prado verde, con su acantilado, el mar de fondo, el faro que no funciona y el cielo está encapotado, parece que va a caer una tormenta y minutos más tarde así sucede. Da igual, te has relajado y para ti sigue siendo el lugar más bonito que has visto.
Año 2006: Decides regresar a ése rincón que te hace disfrutar de la soledad, del silencio y que te deja pensar sin prejuicios. Te encuentras con el prado verde, con su acantilado, el mar de fondo esta vez muy revuelto, el faro que no funciona y el cielo muy oscuro a punto de hacerte la misma jugarreta que la última vez. Minutos después así es y llueve, dejándote completamente empapado.
Año 2008: Recuerdas aquel rincón, tu paraíso personal, en el que un día encontraste la tranquilidad y soledad que necesitas más a menudo de lo que puedes permitirte … vuelves y allí está, el rincón más bonito que habías descubierto. Y te encuentras con su acantilado, el mar de fondo muy revuelto, el faro que no funciona, el cielo muy oscuro y el prado… no es verde??. Parece que han decidido labrarlo, está todo lleno de tierra oscura y lo han cercado con un enorme alambre de espinas y tablones de madera.
Año 2009: No dejas de pensar en tu rincón, tienes la certeza de que todo habrá cambiado. De que lo que viviste un día hace 9 años no se volverá a repetir. Sientes desilusión pues el rincón más bonito que habías descubierto habrá desparecido, y además no tienes ganas de ir para ver cómo otra vez, tu ilusión por aquél lugar se desvanece.
Año 2010: No lo soportas más, necesitas esos destellos de luz de aquel faro. Necesitas volver a ver el cielo lleno de colores, las margaritas del prado verde y el mar al fondo, porque aquel era el rincón más bonito que habías visto nunca, tu rincón.
Decides volver, esta vez acompañado de las personas que te quieren. Quieres compartir aquel lugar.
Conforme te acercas ves el cielo encapotado y pisas el freno, y gritas: NO PUEDO MÁS!!!
Entonces sientes una mano de un amigo que te acaricia la cara, después un abrazo de un familiar y minutos después un beso de tu pareja… Te llenan de fuerza, arrancas y continúas.
Al fin estás allá, miras alrededor y las cosas han cambiado. El prado verde ahora es un campo de girasoles, el faro está apagado, el mar apenas llegas a verlo, y menos aún el acantilado…
Sin embargo, sientes que aquel lugar sigue siendo tu rincón. Es diferente pero también muy agradable. Ahora lo compartes con las personas que te quieren. Vuelves a sentir ilusión, ganas de vivir esos momentos que ahora disfrutas en compañía. Ganas de seguir descubriendo más rincones. Ganas de seguir soñando.
PD: Gracias a todos los que me habéis acompañado a lo largo de estos años difíciles.
Gracias a todos los que trabajáis hoy alrededor del implante coclear por ayudarme a recuperar la ilusión.